Yo era muy de los jedi hasta que vi a Obi-Wan y a Qui-Gon Jin enfrentándose contra Darth Maul, y me dije: «¿Dos contra uno? ¿Esto qué mierda es?». Luego repitieron la jugada con el Conde Dooku, y eso ya me terminó de convencer de que los jedi no eran más que una panda de cobardes que no tenían cojones de enfrentarse solos a un lord Sith, y que en realidad formaban parte del aparato represor de una república teocrática que merecía el final que tuvo.