Será el caloret
Vuestra noble faz empaña
el nublo del deshonor;
desfaced pronto esa niebla,
cortaos los cuernos, señor;
que el mundo entero os señala,
Europa os llama cabrón,
y cabrón repite el eco
en todo el pueblo español.
La corte de Isabel II y Francisco era un soberano y continuo escándalo, equiparable solo a las variadas performances de Corinna, su novio Juan Carlos, el elefante, Botsuana y alguna que otra barbacoa con el sonrojante jefe del Estado tocado con gorra rapera.