Abutiu, tambien escrito Abuwtiyuw, fue un perro que vivió hace más de 4300 años en el antiguo egipto. Era un miembro de la guardia imperial de un faraón desconocido de la sexta dinastía. Fue enterrado con los honores de un noble, incluyendo una inscripción que dice:
"El perro que custodiaba a Su Majestad se llamaba Abutiu. Su Majestad ordenó que lo enterraran ceremonialmente, que le dieran un ataúd del tesoro real, lino fino en gran cantidad e incienso. Su Majestad también le dio ungüento perfumado y ordenó que le construyeran una tumba con cuadrillas de albañiles. Su Majestad hizo esto para que el perro fuera honrado ante el gran dios Anubis."
La placa con esa inscripción fue encontrada en 1935 entre los restos de una antigua mastaba (tumba egipcia previa a las pirámides) pero había sido usada como material de construcción de la misma, es decir que había sido extraída de la demolición de una mastaba más antigua. Es importante entender que la historia de Egipto es muy larga, y muchas piedras de construcción fueron reutilizadas varias veces. Gracias a esta inscripción, Abutiu es el perro más antiguo cuyo nombre conocemos.
Las momificaciones de perros eran comunes en el antiguo Egipto, donde los enterraban dentro de estatuas con la forma del dios Abubis, con cuerpo humano y cabeza de chacal.
Abutiu puede significar "orejas en punta" (se piensa que era un tzem, una de las primeras razas de perros conocidas, con orejas puntiagudas), o tal vez es un nombre inspirado en la onomatopeya egipcia para el ladrido "abuw".
Es decir que Abutio, el nombre elegido por el faraón para uno de los perros de su guardia, y que se transformó en el nombre más antiguo conocido, tal vez significa "guaguau". Lo cual me parece algo hermoso.
Fuente: Damian Kuc